Formas societarias en España
10 Febrero, 2023
El territorio español es el escenario ideal para todos aquellos extranjeros que quieren iniciar su propio negocio. Infraestructuras ideales, talento y un ecosistema emprendedor hacen que ciudades como Barcelona, Madrid o Alicante sean la mejor opción a la hora de decidir dónde arrancar. Sin embargo, la duda reside en que tipo de sociedad puede ser la mas adecuada, tener más beneficios fiscales, o ajustarse a mis necesidades.
Antes de iniciar el proceso de constitución de una empresa, debemos decidir cuál será el tipo de la misma. Pero no estamos hablando del modelo de negocio o del proyecto concreto. Estamos hablando de su estructura legal.
1.SOCIEDAD DE RESPONSABILIDAD LIMITADA (SL)
Esta es, sin duda, la estructura empresarial más popular en el territorio español. ¿Por qué? Por su flexibilidad y facilidad en el proceso de constitución, exigiendo tan sólo 3.000 € como inversión de capital mínima.
Ventajas: la responsabilidad es limitada, por lo que ante posibles pérdidas los socios no deben responder con su patrimonio. Tu responsabilidad se limitará a la inversión de capital realizada. Por lo tanto, si has invertido los 3.000€ de capital inicial, esa es la cantidad máxima que se te puede pedir a ti a nivel personal como fundador en caso de endeudamiento.
Los trámites para la constitución y el funcionamiento son más sencillos que los de una sociedad anónima; para constituirla se requiere un capital asequible y puede ser unipersonal; a partir de cierto nivel de beneficios, los impuestos son menores que los de un trabajador autónomo y con una sociedad el trabajador autónomo puede desgravarse su sueldo como gasto. En este caso no pagarás impuesto sobre la renta, sino impuesto de sociedades. Éste que equivale al 25% de los beneficios de la empresa. También es necesario presentar la declaración de IVA. Sin embargo, existen varias exenciones de las que te puedes beneficiar y que pueden reducir considerablemente la base imponible; por lo que ahorrarás dinero.
Desventajas: las participaciones no son fácilmente transmisibles, los socios tienen prioridad (lo que puede entenderse como ventaja si lo que se desea es restringir el acceso de terceros a la actividad empresarial), por lo que no es un tipo de sociedad mercantil conveniente si pretendes atraer a un gran número de inversores.
2.SOCIEDAD ANÓNIMA
Una sociedad anónima es la estructura legal reservada para las grandes empresas que comercian con acciones. Se caracterizan por una estructura mucho más rígida y se necesitan 60.000 € para su constitución.
Ventajas: la sociedad está dividida en acciones que se transmiten libremente, la responsabilidad de los socios es limitada al capital aportado, puede ser unipersonal y puede cotizar en bolsa. Además, determinadas actividades como las sociedades bancarias, farmacéuticas, los seguros, las gestoras de fondos de pensiones etc, exigen este tipo de sociedad mercantil.
Desventajas: el capital mínimo exigido es elevado, no se puede controlar la presencia de personas ajenas a la empresa y los trámites para la constitución y funcionamiento son más complejos que los de, por ejemplo, una sociedad limitada.
3.PROFESIONALES AUTÓNOMOS
No podemos olvidar la forma más básica, los autónomos. Aquí se incluyen las profesiones liberales incluidas en el IAE divididas básicamente en dos grupos: profesionales colegiados (médicos, ingenieros, psicólogos o arquitectos) o no colegiados (programadores, diseñadores o maquilladores). Gran parte de estos profesionales no poseen establecimiento ni local, recibiendo el nombre de "freelance".
Este profesional retiene el IRPF en su factura, siendo el tipo de gravamen inferior al resto (7% para nuevos autónomos y 15% general).
Sin embargo, a diferencia de la sociedad, si asumes esta forma, tu responsabilidad no será limitada. Todo pasará por ti, incluso esas deudas que puedas llegar a contraer.
4.OTRAS FORMAS SOCIETARIAS
Existen muchas más formas societarias en España, de entre las que destacan algunas como las que expondremos. Sin embargo, a la hora de constituir una nueva en España siendo extracomunitario, la más recomendable por antonomasia es la Sociedad Limitada como hemos visto. Contamos también con:
Sociedad colectiva: es un tipo de sociedad mercantil de carácter personalista, en la que los socios desempeñan un papel muy importante, ya que no solo invierten capital, sino que aportan su trabajo y gestionan la empresa directamente.
Sociedad comanditaria (o en comandita): es similar a la sociedad colectiva, si bien tiene la diferencia de que en este tipo cabe la posibilidad de que un determinado tipo de socios no tenga que encargarse directamente de la gestión de la misma.
Cabe tener en cuenta que, la ley española permite que puedan constituir sociedades en España tanto nacionales como extranjeros, sin embargo, se exige que el socio extranjero sea poseedor de un Número de Identificación Fiscal (NIE) para llevar a cabo todos los trámites de la constitución, como, por ejemplo, la firma de la escritura de constitución ante Notario etc. En el caso de personas jurídicas, deberá traducirse su escritura de constitución y, en su caso, certificación de inscripción en registro mercantil y justificar la representación de la persona que actúa en su nombre, habitualmente el administrador.
Esto ha sido una breve guía para todos aquellos extranjeros que pretenden empezar su empresa en el territorio español. Crear una empresa en España es una oportunidad que está al alza en estos últimos años. Nuestro país es el enclave perfecto para empresas de exportación, servicios, turismo y comunicaciones, entre muchas otras. De hecho, las exportaciones españolas de bienes a terceros rondaron los 300.000 millones de euros en el último año1. Además de ello, de ese importe, cerca del 43% fue generado por empresas extranjeras establecidas en España.
Por otra parte, la red de comunicaciones e infraestructuras que hay en España es una de las mejores y más completas del mundo. Es el país con más kilómetros de autovías y autopistas de la Unión Europea, contando también con la red de Trenes de Alta Velocidad más extensa de Europa y tercera a nivel mundial. En su informe de competitividad, el World Economic Forum (WEF) puso a España en el 12º puesto de calidad a nivel mundial en lo que a infraestructuras y logística se refiere. Un dato fundamental sin duda para cualquier empresario extranjero que esté buscando el lugar idóneo para iniciar un proyecto empresarial.
Por todos estos motivos, te recomendamos que te pongas en contacto con nosotros para que te ayudemos en todo el proceso. Nuestros abogados especializados en derecho mercantil y de extranjería resolverán todas tus dudas y te acompañarán en todo el proceso de constitución. Además, nuestros contables se encargarán de sus impuestos, contabilidad y demás trámites para que usted solo disfrute de los beneficios generados.